Las parejas contratan un seguro de bodas para cubrir pérdidas financieras inesperadas relacionadas con su boda. Dado que el costo promedio de una boda en los Estados Unidos es de más de $30,000, tiene sentido proteger la inversión financiera.
Las situaciones potencialmente cubiertas por el seguro de bodas incluyen:
- Pérdida o daño del vestido de novia o esmoquin
- Pérdida de depósitos como resultado de la quiebra del proveedor
- Cancelación debido a enfermedad, lesión, servicio militar o condiciones climáticas extremas
- Reclamaciones por responsabilidad civil ante terceros o por venta de bebidas alcohólicas.
